También es sabido que las leyes en España aunque se intentan endurecer son lo de más irrisorias a la vez que decepcionantes, para todas las personas que nos gustan los animales, y como dueños de uno no somos capaces de entender a alguien que los maltrata.
Cualquier persona que tenga internet y visite una página de anuncios encuentra rápidamente uno de los motivos del descontrol de la población (canina sobre todo): los criaderos ilegales. Particulares que explotan a los animales obligándolos a tener camadas hasta agotarlos. Y por supuesto, todo ese dinero sacado de cachorros “de raza” y “pedigrí” es dinero que luego no se declara.
Este descontrol de animales, junto con la poca reflexión de muchísima gente que compra un cachorro como un juguete, provoca al año en España tanto numerosos abandonos como crueldades sin nombre.
La reflexión me viene, por un lado por esta noticia sobre un pastor alemán que había dado a luz tres camadas sumando entre las tres 35 cachorros. La perra era prolífica en sus partos, pero si el dueño no hiciese algo con los cachorros (como venderlos, por ejemplo), pues seguro que al primer parto la hubiera esterilizado.
O eso o el dueño tiene 35 amigos de confianza para regalarles a los animalitos.
Por el otro lado, dado que he estado estos días visitando tiendas de animales, y viendo cómo se exhibe a los perros, gatos y otros animales domésticos en escaparates, con carteles de “No tocar” y la gente tamborileando en los cristales. Cachorros que pueden alcanzar cifras astronómicas de 1000€.
Para intentar llegar a una solución habría que hacer muchas cosas: abaratamiento de las operaciones de esterilización, campañas de concienciación para la ciudadanía, endurecimiento de multas (recogida de excrementos, maltrato…), y sobre todo controlar la población animal.
Chiringo está en la Protectora de Segovia
Se me ocurría a mí una solución quizás un poco arriesgada, pero que yo creo que podría funcionar y desde aquí propongo a quien le pueda interesar.
Que los animales que se vendieran en tienda (perros, gatos, etc) se vendieran esterilizados y con chip. O fuera obligatorio esterilizarlos a posteriori. Lo primero supondría vender a los cachorros con unos 6 meses (cuando se les puede operar) que ya no resultan “tan monos” y la gente actuaría al comprarlos más con la cabeza que por un impulso. Así mismo yo propondría vender los animales de pedigrí muchísimo más baratos (100-200€ como mucho).
Las personas que quisieran tener el animal sin esterilizar, tendrían que ser criadores acreditados, (declarando en consecuencia a hacienda) y tendrían que pagar cifras mayores por los animales. (2000€ por animal).
Esta situación, el contra creo, que sería un mercado negro de animales, al que por supuesto habría que dedicar medidas para combatirlo. Pero aun así creo que las cifras de animales abandonados al año o muertos merecería algún tipo de solución tajante al problema.
Pero bueno, parece que muy poco a poco, la gente comienza a concienciarse. A día de hoy (viernes 4 de abril) hemos podido leer en una microcolumna de varios periódicos, la noticia que en Becerril de la Sierra, una colonia de gatos salvajes ha sido atendida por un servicio de la Comunidad, y los ha capturado. A los ejemplares más dóciles se les ha dejado en protectoras para su adopción, y los más difíciles se les ha reinsertado en la urbanización donde estaban esterilizados y con el compromiso por parte de los vecinos de alimentarles únicamente con pienso.
Medidas así son necesarias en este país donde el respeto por los animales demuestra claramente la mentalidad y el retraso que llevamos en tantísimas cosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario